Especial de Halloween: Recomendaciones de thrillers

¡Hola lectores!

Se acerca Halloween y aunque no soy ninguna fan de las historias de terror, sí que me gusta empaparme del ambiente que reina durante estos meses. Por eso he decidido hacer una entrada recomendando lecturas para estas fechas, pero lecturas que no sean de terror. 

Así que, si sois como yo que no os gusta este género pero sí que os gusta Halloween, aquí os traigo algunos thrillers/novelas negras/novelas policíacas, que también van acorde con la temática. 

        

Álex, Pierre Lemaitre 

Este es uno de esos libros que siempre recomiendo cuando me preguntan por este género, pero he de decir que hacía mucho que no lo mencionaba en el blog. Técnicamente es el segundo de una trilogía, pero se puede leer de forma independiente. Es la historia de un secuestro y es oscuro, sangriento, con personajes llenos de misterios y unos giros argumentales asombrosos. 

Heridas abiertas, Gillian Flynn

Sólo con deciros que esta es la autora de Perdida ya os tiene que entrar un poco de curiosidad. El libro sigue a la protagonista, que regresa a su ciudad natal a investigar unos asesinatos. Lo que más me sorprendió de este libro fueron sus personajes tan complicados, llenos de traumas y de defectos. Por así decirlo, en este libro no hay ni un solo personaje "bueno". Esto, unido a una atmósfera asfixiante y un final que sorprende, lo hacen perfecto para leer en Halloween.

Siempre hemos vivido en el castillo, Shirley Jackson

En verdad, este libro no es que me gustara demasiado. Digamos que esperaba otra cosa. Aún así, no puedo negar que tiene mucha calidad, ni el gran trabajo que hace la autora con su protagonista, Merricat, que sin duda es lo que hace que se pueda calificar el libro de terror psicológico. 

Diez negritos, Agatha Christie 

No es ningún misterio que Agatha Christie es una de mis autoras favoritas. Aunque la mayoría de sus libros suelen tener un ritmo más  bien tranquilo, no es ese el caso de Diez negritos, que me parece un thriller en toda regla, pues me mantuvo pegada a las páginas y en tensión hasta que lo terminé. Además, como no podía ser de otra forma, el final es de escándalo y la autora te dejará con la boca abierta seguro. 

Reseña: La dama de las Camelias

Título: La dama de las Camelias
Autor: Alexandre Dumas
Editorial: Debolsillo
Número de páginas: 272
ISBN: 9788466793179
Precio: 11 €
Puntuación: 6,5

Alexandre Dumas dio vida a una de las heroínas más célebres de la literatura romántica, Marguerite Gautier. Entre el romanticismo final y los comienzos de la novela realista, La dama de las camelias narra los trágicos amores de la bella cortesana y Armand Duval, un joven de familia respetable. Los convencionalismos sociales y la hipócrita moral imperantes constituirán un obstáculo que ni siquiera el apasionado y sincero amor de los protagonistas logrará derribar.

Esta historia empieza con una subasta: Marguerite Gautier, una prostituta -o entretenida, como dice el autor- ha muerto y están subastando todos sus objetos para saldar sus deudas. El protagonista se encuentra en esta subasta para ver si puede hacerse con algo que le interesa, y llevado por un impulso, termina comprando un libro con una dedicatoria. A raíz de este libro y la misteriosa dedicatoria, el protagonista va a interesarse cada vez más por la historia de esta entretenida. 

Sus pasos le conducirán hasta Armand Duval, amante de Marguerite Gautier, que terminará contándole cómo la conoció y cómo fue su intensa historia de amor con ella. 

La dama de las Camelias es un libro bastante corto, con una prosa sencilla y directa que ayuda a que se lea rápidamente, a pesar de que al principio tardó un poco en engancharme. Narra, básicamente, una apasionada y turbulenta historia de amor protagonizada por Armand y la una famosa entretenida de París: Marguerite. 

Teniendo en cuenta la época, sabía la clase de enamoramiento que me iba a encontrar. La verdad es que este tipo de romances, tan a primera vista, que surgen en tan poco tiempo y que son tan apasionados pero apenas tienen ninguna base real, me conmueven más bien poco. No puedo decir que La dama de las Camelias me haya gustado por su historia de amor, precisamente. Me parece que es un romance que ya ha quedado bastante desfasado. 

El personaje de Armand, el loco enamorado de Marguerite que tanto la ama, me ha parecido bastante idiota. Armand tiene un comportamiento muy infantil y caprichoso, además de que le monta a Marguerite escenas de celos a los dos días de haberla conocido cuando sabe de sobra que es una entretenida... en serio, no se qué se esperaba este hombre. Sus celos enfermizos, su actitud durante la ruptura de ambos y su acto final me parecen de una inmadurez y un egoísmo extremos, y me resisto a llamar amor a lo que este hombre siente. 

Pero La dama de las Camelias tiene otros elementos que sí me han gustado: la propia Marguerite, y la crítica a la sociedad del autor. 

En contraposición a Armand, Marguerite es un personaje carismático, con muchas dobleces, con los pies bien puestos en la tierra, un gran corazón y toda la madurez que le falta a su compañero. Por un lado, vive entre lujos y riquezas a los que no quiere renunciar y por otro, su amor es tan puro como el de la más casta mujer. 

También he de reconocer que me encantaron las reflexiones del autor sobre el mundo de las prostitutas y la hipocresía de la sociedad a la hora de tratar con ellas. Nos regala varias frases lapidarias, aunque sus pensamientos en otros temas como el amor, o las mujeres en general dejaban algo más que desear -por otro lado, totalmente entendible para la época en la que esto fue escrito, y aún así, bastante más avanzado-. 

En resumen:  La dama de las Camelias es un clásico ligero y cortito, fácil de leer, que guarda una apasionada y trágica historia de amor entre sus páginas. A a pesar de todo, este para mí no ha sido ni de lejos su mejor elemento.

Película: C'est la vie!

Título: C'est la vie!
Director: Éric Toledano, Olivier Nakache
Guionistas: Éric Toledano, Olivier Nakache
Género: Comedia
Duración: 1h 53 min
Puntuación: 7

Una boda de lujo en un castillo francés del siglo XVIII se les va de las manos a sus responsables. El principal encargado es Max, un organizador de bodas que en esta ocasión se enfrenta a una celebración de alto standing nada menos que en un castillo. Todo parece estár perfectamente orquestado para que el evento sea un éxito: camareros, orquesta, menú, DJ y decoración floral, pero a cada momento surgen tropiezos que hacen que el resultado roce lo catastrófico.

Dejando claro que la comedia no es para nada mi género favorito y que me cuesta encontrar películas que me gusten, he de decir que la comedia francesa rara vez suele decepcionarme, por eso me animé con C'est la vie! 

Como dice la sinopsis, la película trata sobre la organización de una boda. Es una boda a lo grande: en un castillo medieval, con orquesta, banquete, muchísimos invitados y toda clase de lujos. 

El protagonista es Max, que es el máximo responsable de toda la organización. Pero junto a Max tenemos un gran elenco de personajes secundarios, todos muy bien caracterizados y cada uno con características o dramas personales que harán peligrar toda la celebración. 

Tenemos al fotógrafo maleducado y zampón, al novio estirado y quisquilloso, el camarero nuevo que finge tener experiencia, el cantante de la orquesta con un gusto musical bastante particular... vamos, ya os hacéis una idea del desastre que va a ser todo. Todos los personajes son magníficos. En pocos minutos obtenemos una idea general de cada uno de ellos, y tanto las actuaciones como las relaciones entre ellos arrancan más de una carcajada. 

Aunque la situación está al borde del desastre en todo momento y sí que hay un par de situaciones que son bastante locas, tampoco es una película que tenga muchos momentos exagerados o demasiado extremos, más bien hace gala de un humor sutil pero constante. 

Eso sí, es cierto que la trama es bastante predecible. En todo momento sabes hacia donde se dirigen las cosas y el final feliz está asegurado. Por otro lado, tampoco es que su intención fuera sorprender, sino hacernos pasar un buen rato. 

La pega que le pongo a C'est la vie es que, aunque la disfruté mucho, llegó un punto en el que se me hizo demasiado larga. Media hora menos y hubiera sido una experiencia perfecta. He de decir que algunas tramas se alargaron un poco, y el drama del final se me hizo algo innecesario, que se podría haber cerrado de forma más rápida y ágil. Así que sí, aunque me entretuvo, llegó un punto en el que estaba a punto de empezar a aburrirme. 

En resumen:  Cést la vie es una comedia francesa que cumple su prometido: nos ofrece una buena dosis de humor, un gran elenco de personajes y muchas situaciones en las que parece que todo se va al garete, pero sin resultar inverosímil (la mayoría de las veces). Lo único que cambiaría sería su duración, que para mi gusto es un poco larga. 

TTLG#27: Sagas que se alargan innecesariamente

¡Hola lectores!

Tenía ganas de traeros otra entrada de esta sección -que disfruto muchísimo haciéndolas- y se me ocurrió escribir acerca de esas sagas que empiezan como libros autoconclusivos, luego se convierten en trilogías, luego en tetralogías, y así hasta el infinito...

Es algo que pasa muchísimo en el mundo del cine -series a las que les sobran un par de temporadas, trilogías que se podrían haber resumido en una película- pero, por desgracia, también pasa en el mundo de los libros.

A ver, no es que sea hater de las sagas en sí, para nada. Hay historias que necesitan más de un libro para ser contadas, y son una auténtica maravilla -véase la trilogía de Nacidos de la bruma, Harry Potter, Canción de hielo y fuego, Crónica de un asesino de reyes...-. Cada autor tiene todo el derecho del mundo a tomarse su tiempo y su espacio para contar una historia. Si con un libro de 200 páginas te es suficiente, mejor que mejor. Si necesitas 4 tochos de 800 páginas porque no puedes resumirlo más, pues oye, tampoco está mal.

El problema viene ligado, normalmente, al tema económico. Una historia que ya está totalmente planteada, desarrollada y solucionada, con un final acorde... y de repente el autor/a en cuestión decide alargar la cosa 3 libros más. Experimento que, por regla general, suele suponer un bajón importante en la calidad de la historia. ¿Por qué? Porque en este caso, no es algo que se haya hecho por necesidad, porque realmente la historia estaba incompleta y se necesitaban más libros para llegar al final. En estos casos normalmente la historia ya estaba terminada, pero el autor/a se saca alguna idea descabellada de la manga para tener a los lectores enganchados durante un par de libros más. El problema viene cuando las continuaciones son innecesarias, y se hacen simplemente para ganar pasta. 

No digo que, aún así, en estos casos no pueda resultar una buena continuación de saga, que también podría ser. Lo que pasa es que es un caso más bien excepcional. 
Y a lo mejor aquí se me echan los lobos al cuello, pero hay casos que a mí me dan que pensar. Cassandra Clare, por ejemplo. Autora de la saga Cazadores de sombras. La saga original iba a ser una trilogía, y luego se alargó hasta unos ¿6 libros? Después saca otra trilogía sobre Los Orígenes. Después, una trilogía con otros protagonistas. Otra trilogía con la vida de Magnus Bane... y así. Una vez pase, pero a estas alturas me da a mí que esta señora lo que quiere es explotar la gallina de los huevos de oro. Y no estoy diciendo que las otras trilogías sean malas, podrían no serlas -que no las he leído-.

También tenemos a Rick Riordan, señor que tiene ochenta mil trilogías sobre mitología griega y romana y que me parece que ahora se está animando con otros tipos también. Leí la saga de Percy Jackson y no me pareció mala, pero lo intenté con la siguiente y era repetir otra vez lo mismo. Sus libros siguen siempre la misma fórmula, independientemente de que te gusten o no.

Luego está un señor que tal vez no conozcáis pero que probablemente haya escrito la saga más larga de toda la historia. Se llama Terry Goodkind y su saga tiene unos 25 libros aproximadamente, y vienen más en camino. Tiene mérito porque consiguió mantenerme enganchada hasta el número 14 más o menos, pero ya está bien. ¿No le parece que ya es suficiente, con 25 libros?

Y podría hablar aquí de Stephanie Meyer y su totalmente innecesario libro de "Vida y muerte", de E.L James y su versión de cincuenta sombras narrada desde el punto de vista de Christian Grey o de todas esas sagas de fantasía que meten libros entre medias sobre algún personaje más secundario y que normalmente suelen ser malos a más no poder.

The seven husbands of Evelyn Hugo, Taylor Jenkins

Título: The seven husbands of Evelyn Hugo
Autora: Taylor Jenkins Reid
Editorial: Simon & Schuster
Número de páginas: 400
ISBN: 9781501139239
Precio: 14 €
Puntuación: 8

Evelyn Hugo finalmente está lista para contar la verdad acerca de su glamurosa y escandalosa vida. Pero cuando elige a la desconocida Monique Grant para el trabajo, nadie en la comunidad periodística está más asombrado que la propia Monique. ¿Por qué ella? ¿Por qué ahora? 

Citada en el apartamento de Evelyn en Upper East Side, Monique escucha mientras Evelyn despliega su historia: desde abrirse camino hasta Los Angeles en los años 50 hasta su decisión de abandonar el mundo del cine en los 80, y, por supuesto, los siete maridos que tuvo durante el camino. 

Este libro literalmente se coló entre mis lecturas. No tenía ninguna intención de leerlo ya mismo, pero decidí leer un par de páginas en un rato que estaba aburrida y ya fue un no poder parar hasta terminarlo. 

Evelyn Hugo ha sido una estrella de Hollywood, al más puro estilo de Marilyn Monroe. Con una belleza de escándalo, ganadora de un Oscar y casada nada más y nada menos que siete veces, Evelyn Hugo es todo un icono de su época. Ahora, hace ya años retirada de la actuación, por fin se decide a contar toda la verdad sobre su vida no a otra que a Monique, una periodista bastante desconocida. A lo largo de la novela las grandes incógnitas serán, sin duda, por qué Monique es la elegida para este trabajo, y cuál fue el verdadero amor de Evelyn Hugo. 

Este libro trata multitud de temas. Por supuesto, uno de los pilares principales es el amor, pero también nos mete de lleno en el mundillo del cine, en la fama, las apariencias, las mentiras, y todo lo que Evelyn estuvo dispuesta a hacer para brillar, para llegar a lo más alto. Además, nos habla de la familia y de los sueños, alguna que otra traegida y toca otros temas que no me los esperaba para nada pero que no los comento porque sí que considero que sería hacer un poquito spoiler. 

Escrito con una pluma ligera y muy fluida, The seven husbands of Evelyn Hugo no tarda en arrancar y en atraparte entre sus páginas. Ya he dicho que no le faltan temas que tratar, que el ritmo no decae y que no dejan de pasar cosas. Es un libro que busca entretener, fácil de leer y perfecto para desconectar, pero eso no significa que sea malo ni superficial en los temas que trata. Al contrario: creo que este libro da todo lo que promete, y no peca de nada. 

Para empezar, creo que todos los temas que toca lo hace con una gran sensibilidad. Pasan bastantes cosas, es cierto, pero no cae en el drama gratuito ni en el salseo por el salseo. Las cosas que pasan, pasan con sentido. Además, los personajes están bien construidos, son correctos y cumplen su cometido sin resultar planos en absoluto. De entre todos ellos, por supuesto, el personaje de Evelyn brilla con luz propia, los eclipsa a todos. 

Evelyn Hugo es una mujer que no siempre ha tenido una vida fácil, y que ha tenido que luchar por conseguir sus sueños. Su fortuna se la ha labrado con esfuerzos, y a base de sacrificios. Evelyn es un personaje luchador, con temperamento, muy testaturda, que no deja que nadie se meta en su camino cuando tiene una meta. Pero lo que más me ha gustado de ella es que es un personaje con muchas imperfecciones. Evelyn comete muchos errores, su código moral a veces puede ponerse en entredicho, es una persona que siempre va a llegar a su fin, sin importar los medios.

Tal vez el final sea lo más predecible del libro, pero igualmente en esta historia lo importante no es que el final te sorprenda, sino cómo poco a poco se ha llegado hasta ahí. Además, simplemente me parece el broche perfecto para cerrar la historia de la carismática Evelyn Hugo.

En resumen:  Merece la pena dejarse atrapar por este libro y conocer a Evelyn Hugo. No es un libro que vaya a cambiarte la vida ni a marcar un antes y un después, es uno de esos libros que buscan entretener, pero de los que están bien hechos. 

Escribiendo: Creando fichas de personajes

¡Hola lectores!

Hace poco estuve reeditando las fichas de mis personajes y a raíz de eso se me ocurrió hacer esta entrada.
Siempre había tenido en un word información acerca de mis personajes, pero nunca la había estructurado en forma de "ficha" como tal. Para hacer esa información un poco más visual, me animé a crear mini-fichas de personajes con información básica y debajo de esas fichas ya poner el resto de la información de forma más detallada.

Estas mini-fichas contenían información básica del personaje que saqué de otras que había ya en internet. Aunque ya tenía a mis personajes bastante perfilados antes de hacer esto, actualizar las fichas me vino muy bien para replantearme cosas acerca de ellos, o para darme cuenta de que otras no me había parado a pensarlas y que también eran importantes.

Probablemente una de las cosas más importantes y que hay que tener claras sobre el personaje es su objetivo en la vida. Lo que quiere, lo que busca, porque al fin y al cabo va a ser ese objetivo lo que va a mover todas sus acciones, lo que va a determinar que se comporte como se comporta y su papel en la historia.
Al hacer las fichas, me di cuenta de que aunque tenía el objetivo claro de los protagonistas, pero los del algunos personajes secundarios me tambaleaban más. Y son igualmente importantes, sobre todo si quieres crear una historia con un gran número de personajes.

Para mí, este punto está muy relacionado con el anterior. Hay que tener claro por qué ese personaje está en la historia, cuál es su papel, que importancia va a tener y cómo va a influir en la trama. Además, el papel que desempeña tiene que tener sentido teniendo en cuenta su objetivo. Probablemente, su objetivo sea lo que marque su función en la historia. O, al menos, tiene que actuar en consecuencia a eso. Además, ningún personaje tendría que estar porque sí en la historia, todos tienen que tener su aportación, aunque sea mínima.

Me resultó muy curioso darme cuenta de que no me había planteado este punto para la gran mayoría de mis personajes, ni siquiera para los importantes. Claro que tenía en mente algunos romances o intereses amorosos que surgirían en la historia, pero no me había parado a pensar la sexualidad como tal. La sexualidad no va a definir a tu personaje, claramente, tal vez ni siquiera tenga la más mínima importancia en la historia. Pero es importante que el escritor lo tenga claro, igual que tienes claro la edad de tu personaje, si es hombre o mujer, o quiénes son sus padres. 

Me di cuenta de que, por costumbre, había supuesto que la gran mayoría de mis personajes serían heterosexuales. Luego me paré a pensarlo, y vi que obviamente no tenía por qué ser así y que en muchos casos, ni siquiera era lo más lógico. Simplemente lo había dado por hecho. Me alegra poder decir que he enmendado esto, no porque crea que es lo políticamente correcto sino porque en muchos casos es lo que mejor casaba con mis personajes, y le aportaba muchísima más variedad, riqueza e interés a la historia. 

Miércoles musical: Más canciones de amor que me encantan

¡Hola lectores!

En una de las últimas entradas de esta sección os hablé de algunas de mis canciones de amor favoritas de todos los tiempos. Por supuesto, me quedé con ganas de compartir con vosotros muchas otras que no aparecieron en esa entrada, así que por eso ahora os traigo la continuación. 

I don't want to miss a thing, de Aerosmith. La primera canción que escuché del grupo y que me hizo amarlo, y una de las más famosas que tienen, no sin razón. 

Time of my life, de la banda sonora de Dirty dancing. Lo mejor de esta película es sin duda el final, y esta canción unida a ese baile me pone los pelos de punta. 

Say something, dúo de A Great big world y Christina Aguilera. Esta canción me parece super triste, y tal vez es más diferente del tono que tienen las otras dos, pero tenía que ponerla aquí por la cantidad de emoción que desprende.