Director: Jon Favreau
Guionistas: Irene Mecchi
Género: Aventura, drama
Duración: 118 minutos
Puntuación: 7
Simba es el hijo del rey de los leones, Mufasa, y heredero de todo el reino. Pero cuando su padre es brutalmente asesinado por su tío Scar, decidirá huir, dejando vía libre para que su tío tome el puesto de su padre como líder de la manada. En su camino, Simba se encuentra con el suricato Timón y el jabalí Pumba, que le enseñarán a vivir la vida sin preocupaciones. Pero el joven león se verá obligado a decidir entre su vida libre de problemas o su destino como rey.
Como muchos otros que han visto la película original, tenía muchas ganas de ver este remake de Disney, ilusión por volver a encontrarme con una de mis películas favoritas de todos los tiempos y un poco de miedo porque no fuera todo lo prometido. Tengo bastantes cosas que decir de esta nueva versión de El rey león, así que vayamos a ello.
Las imágenes. Las imágenes son una pasada, como ya estaba claro que iban a ser desde que salió el trailer. En serio, visualmente esta película no tiene desperdicio, es un asombro constante ante el trabajo que han hecho.
Por supuesto, los paisajes son una preciosidad y un regalo para la vista, pero lo realmente impresionante es lo que han hecho con los animales. Los movimientos, los gestos de los leones y absolutamente TODO está tan bien hecho que parecen casi reales. A veces uno podría hasta dudar de si son animales de verdad o es sólo ordenador.
La película es un calco de la versión animada, casi plano por plano, lo cuál no es necesariamente una pega ya que es lo que nos prometieron desde el principio. Sí que hay algún ligero cambio, pero son bastante sutiles y sin mucha importancia. Realmente, la historia es tal cual la versión original, sólo que actualizada.
Vayamos a las canciones. La verdad es que tengo sentimientos encontrados respecto a esto. En general, entiendo que en esta versión han tirado por el realismo y han querido ceñirse a ello. Personalmente, yo prefería la magia y la locura de la versión animada y lo hubiera disfrutado más si eso lo hubieran incorporado en esta película de alguna manera. Pero de forma general, me parece que han hecho buenas adaptaciones de las canciones. Eso sí: El ciclo sin fin para mí le falta fuerza, serán gustos personales pero a mí me emocionaba más la original. Y Preparaos... ¿se puede saber que ha sido eso? Con esa canción sí que estoy cabreada. Prácticamente ni la cantaron, Scar dijo cuatro frases y ala, pasemos a lo siguiente. Me calcas la película original punto por punto y uno de los momentos más impresionantes que es la canción del villano, ¿prácticamente te lo saltas? No entiendo por qué, la verdad. Podrían haber hecho como con las otras canciones y haberlo adaptado de una forma más realista, pero por lo menos haberla cantado entera, porque era un temazo.
Y ahora, vayamos al que es para mí el mayor problema de El rey león y la razón por la que no consigue emocionar como la original, al menos en mi caso. Y el problema es el realismo que han querido darle.
Eso es algo que, en las canciones, todavía se puede salvar, porque es cierto que algunas me gustaron bastante aunque no tuvieran esa magia, y en general no lo veo necesariamente como algo negativo. Pero es otra cosa cuando hablamos de las expresiones y los sentimientos de los personajes. ¿Cuál es el problema? Que estos leones parecen leones de verdad, y los leones de verdad no muestran emociones en la cara, no lloran, no se asombran, no se alegran, no se sorprenden. Vamos, que no cambian de expresión. En la versión original esto es algo que se conseguía muy bien, y creo que tendrían que haber intentado imitar eso en este remake y no tirar tanto por el hiperrealismo.
Mientras estaba viendo esta película, notaba que no conseguía transmitirme tantas cosas como la versión animada, no lograba que conectara tan bien con los personajes, ¡pero si al principio hasta me costaba distinguirlos! Lo único que hacen es mover la boca (y poco). Creo que esto ha sido un error fatal, porque el resultado es que a esta película le falta sentimiento, le cuesta transmitir. Normal, parece que estás viendo un documental de la 2.
Y con todo esto, la película en sí no es mala. Pero claro, las comparaciones son odiosas, y hay que tener en cuenta que se está adaptando una película que, para mí, era de 10. Esta película no es mala, pero es una película de 7, no de 10. Y eso se nota, y, en parte, decepciona.
Mi queja con El rey león 2019 no tiene nada que ver con que yo sea una purista de la versión original y no quiera ver nada nuevo. Para nada, fui con mucha ilusión a verla al cine y quería que me gustara. Quería que fuera tan impresionante como la otra. Pero, sinceramente, no lo ha sido.
En resumen: El rey león es una nueva versión de este gran clásico que brilla en el apartado visual, y que es correcta en cuanto a la adaptación de las canciones de la versión original. Eso sí, creo que comete el error de querer ser demasiado realista, y por culpa de esto se pierde la magia de la versión animada. Estos leones no muestran emociones ni sentimientos, y por eso es una película que no transmite lo mismo.