Película: Tan fuerte, tan cerca (Extremely loud & incredibly close)

 
Título: Tan fuerte y tan cerca
Director: Stephen Daldry
Guionistas: Eric Roth
Género: Aventura, drama
Duración: 129 minutos
Puntuación: 8,5

Oskar Schell, un niño precoz de once años, es inventor, diseñador de joyas, astrofísico y pacifista. Tras la muerte de su padre en los atentados del 11 de septiembre de 2001, Oskar encuentra un misterioso sobre con una llave y se lanza a la búsqueda de la cerradura que esa llave puede abrir.

Esta película llevaba ya mucho tiempo en mi lista de pendientes, pero por unas cosas u otras nunca le daba prioridad. Antes de empezar la reseña quiero decir que aunque hay un libro no lo he leído, así que voy a hablar de Tan fuerte, tan cerca como película independiente del libro.

Oskar Schell es un niño que pierde a su padre durante el atentado del 11S. Y es precisamente por este argumento que mucha gente ha tachado la película de típico drama americano que busca sacarte la lágrima fácil. Cuando vi este tipo de críticas me asusté un poco, pero después de verla puedo decir que, para mí, nada más lejos de la realidad.

Oskar es un niño muy especial: increíblemente inteligente, más que muchos adultos, pero sin ninguna habilidad social o capacidad para relacionarse de forma normal. No habla con personas desconocidas, le da miedo todo lo que sea mínimamente peligroso (montar en columpio, cruzar un puente) y es muy curioso. Cuando su padre estaba vivo solían jugar a la búsqueda del tesoro, y después de su muerte encuentra una llave misteriosa en un sobre. Oskar piensa que forma parte de la última búsqueda del tesoro, que es una pista que le ha dejado su padre porque quería que descubriera lo que abría la llave.
Y así decide empezar una aventura por toda la ciudad, en la que se encontrará con todo tipo de personas, para encontrar la cerradura de la misteriosa llave.

Tan fuerte, tan cerca es todo un drama familiar, es verdad, pero no ocurre nada de forma gratuita ni busca todo el rato remover tus sentimientos: lo hace de forma natural, sin proponérselo. Y mucha gente podría pensar: "Otra típica película sobre el 11S" pero Tan fuerte, tan cerca no habla de eso. Se centra en la pérdida de un ser querido de forma drástica y en la forma de superarlo, aceptarlo y seguir adelante.

El actor que hace de Oskar se ha ganado todo mi respeto. Es un papel difícil de interpretar, pues tan pronto está alegre como deprimido, en ocasiones es adorable y en otras odioso, a veces te inspira lástima y otras te dan ganar de meterle un buen guantazo. También quiero mencionar a The Renter (no se cómo le llamarán en español), personaje que cobra importancia hacia la mitad de la película y que también me ha encantado. Era todo un espectáculo ver las aventuras de un niño tan raro con un viejo que no habla y que cada vez que quiere decir algo lo tiene que escribir en un cuaderno. La pareja que hacían estos dos me ha hecho reír en numerables ocasiones, pero también me ha sacado alguna lagrimilla.

En resumen: Esta película me ha dejado muy buen sabor de boca. Mezcla risas y lágrimas y cuenta una historia que enternece, que te entretiene en todo momento y que no peca de exceso de drama.