Reseña: Night School 3: Persecución

Título: Night School 3: Persecución
Autora: C.J Daugherty
Editorial: Alfaguara
Número de páginas: 416
ISBN: 9788420416663
Precio: 17,5 €
Puntuación: 4 / 10

Saga Night School 

1. N.S: Tras los muros de Cimmeria

2. N.S: El legado

3. N.S: Persecución

Sinopsis:

Todo parece venirse abajo tras los muros de Cimmeria…Allie está furiosa y desorientada. Siente la constante amenaza de un espía infiltrado en la Academia Cimmeria. Pero no es la única que se encuentra así: todo parece venirse abajo en la escuela. Los estudiantes no entienden qué está ocurriendo, los profesores se enfrentan unos a otros y las Reglas han comenzado a perder fuerza. Cuando Nathaniel revela su plan, la directora Isabelle deja de tener control sobre la academia, pero también sobre la Night School y toda la organización que la sustenta. El miedo ha invadido el lugar y la amenaza está próxima. No se puede confiar en nadie: ya nadie está salvo. Esta vez Natahaniel no representa una amenaza para los alumnos de Cimmeria; ellos mismos se han convertido ahora en la verdadera amenaza.

Opinión personal (spoilers de libros anteriores):

Night School es una saga que, aunque no me emocionaba, me resultaba entretenida y tenía un argumento original. No es que tuviera unas ansias locas de coger el tercer libro, pero no tenía nada mejor que leer y me dije: ¿por qué no? Bien, Persecución acaba de matar todas mis ganas de continuar con la saga. En serio, yo he terminado con Night School.

La historia comienza después de la muerte de Jo: Allie está destrozada y enfadada con el mundo, ha dejado de lado a sus amigos y detesta a los profesores por no hacer nada con respecto a ello. Por otra parte, Nathaniel cada vez es una amenaza más palpable. Me encantaría decir qué es lo que hace este personaje exactamente para ser tan peligroso, pero la verdad es que no lo sé. El hombre lo único que hace es plantar una semillita de miedo, y ya todos los alumnos de Cimmeria se descontrolan. Desde mi punto de vista, Nathaniel podría quedarse sentado de brazos cruzados y esperar a que Cimmeria se derrumbe por sí sola.

Persecución es un libro muy, muy flojo. Si ya de por sí la saga no era una maravilla, pero se leía y entretenía... con un bajón como este, lo siento pero no pienso seguir. Persecución tiene un ritmo más lento y pesado, a tramos incluso aburrido, y una historia que ya se empieza a quedar mediocre y repetitiva. Leyendo este libro me dio la sensación de que la trama no avanzaba: pasaba exactamente lo mismo que en los dos libros anteriores pero cambiando algunos acontecimientos.
Realmente me ha costado terminar este libro, no veía el momento de llegar al final y poder cerrarlo. De hecho, me animaba pensar que ya era el último de la trilogía y por fin podría finalizarla.
En mi opinión, el argumento ha pegado un gran bajón. Las preguntas se han respondido de forma fácil, con pocas explicaciones y sobre todo rápidamente para poder zanjarlas y meternos de lleno en el tema de Nathaniel. La verdad: no sé cuál es el tema de Nathaniel. A mí me parece todo una espiral que gira sobre sí misma volviendo a los mismos temas una y otra vez, sin avanzar ni retroceder, siempre lo mismo.

El triángulo amoroso, aunque ya empieza a cansarme y empieza a volverse previsible, es la única cosa que consiguió mantener mínimamente mi interés. Aún así, el trío Allie-Carter-Sylvain ya no sabe por dónde tirar. Allie se tira todo el libro metida en sus pensamientos, con dudas e inseguridades muchas veces ilógicas, para luego tomar las decisiones equivocadas y hacer cosas incomprensibles. Poco más puedo decir sobre este tema: se ve lo que va a venir, y punto.

Allie en este libro me ha decepcionado. No era una de las mejores protagonistas que he leído, pero conseguía no sacarme de mis casillas. En Persecución, este personaje no me ha transmitido nada. Me ha parecido bastante vacío y plano, y para colmo con una actitud de mártir y de "chica que se sacrifica por todos" que me ponía negra.
En cuanto a Carter y Sylvain, bastante mediocres los dos. Son personajes que no se desarrollan, que no evolucionan, que siguen como siempre y eso ya se hace cansino. No puedo decir nada más sobre ellos.

Por último, mencionar que me parece absurda la obsesión que tiene Nathaniel con Allie, y que por muy justificada que esté en el libro, sigue siendo un sin-sentido completo. Nathaniel no la necesita para nada, ni siquiera por el tema de su hermano, que solamente es otro peón en sus filas. En fin, me parece que se involucra demasiado con estos dos personajes que para él no representan ni la victoria ni la derrota, pero claro, como Allie es la protagonista pues había que ponerle un poco de interés.
Pero teniendo en cuenta que el personaje de Nathaniel es muy mediocre y decepcionante, pues esto no debería sorprender. Las pocas veces que aparece en el libro es de risa, en serio. No sé de donde se han sacado que este hombre es un genio porque no. Sus estrategias son malas de narices y si sale airoso de los pocos enfrentamientos que hay es porque es muy conveniente para el argumento.

Lo único bueno de este libro podría haber sido el final, que representaba ya la conclusión de la saga, pero cuál ha sido mi sorpresa al llegar al último capítulo y descubrir que este no es el final, sino que la autora ha decidido alargar la trama durante a saber cuántos tomos más.

Night School: Persecución es un libro que me ha decepcionado en todos los sentidos. El ritmo se queda lento, el argumento se vuelve repetitivo, los personajes cansinos. Ha sido un libro del que he terminado harta, simplemente, harta. Tampoco lo he odiado con todas mis fuerzas, simplemente mi único deseo era poder llegar al final. Desde luego, mi historia con esta saga se termina aquí.